¡Atención jefes con hijas en edades casaderas! Se está imponiendo la moda de tirarle los tejos a vuestras pupilas por parte de vuestros súbditos.
Si hace unos días no sorprendía la noticia de la relación entre Hamilton y la hija de su jefe, ahora le toca el turno a Ronaldinho, pero con peor suerte que el piloto, porque al parecer Rijkaard no ve con buenos ojos la relación sentimental entre su hija Lindsay y el crack brasileño, según se recoge en el portal servifutbol.com .
Lindsay, fruto del primer matrimonio de Rijkaard, siempre ha estado muy cerca de su padre y viaja con el equipo siempre que sus circunstancias se lo permiten. Así que no es de extrañar que haya surgido el amor entre los jóvenes.
Este posible noviazgo enturbia aún más la relación entre el técnico y el jugador, que últimamente está pasando por uno de sus peores momentos personales y profesionales. Lo que no sabemos es qué fue primero, si a Rijkaard no le gusta el brasileño porque está pasando un mal momento, o el brasileño está pasando un mal momento porque no se ve apoyado por su suegro.
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