Paris Hilton se halla terriblemente desolada. La ricachona muchacha ya lo tenía todo preparado para asistir este próximo domingo a la gala de los Oscars, pero se le ha denegado el acceso y no podrá lucir los lujosos atuendos y complementos que había adquirido para dicho evento.
“Se le saltaban las lágrimas porque se ha quedado sin la posibilidad de conocer a productores que impulsen su carrera como actriz”, han comentado fuentes cercanas a la estrella frustrada en el séptimo arte.
Pero al parecer, con todo el morro que caracteriza a la Hilton, otras fuentes aseguran que “está tentada a pasarse por las fiestas después de la ceremonia para salvar su dignidad”.
¿Qué hará finalmente la reina del conejo frito?
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